¿Cuáles son los síntomas de una infección respiratoria?
Tratar una enfermedad a tiempo hace que sus síntomas sean leves. Te explicaremos cuáles son los síntomas de una infección respiratoria y tratamiento, para que los detectes a tiempo.
¿Qué son las infecciones respiratorias?
Son aquellas enfermedades que afectan desde oídos, nariz, garganta hasta pulmones. En la mayoría son ocasionadas por virus, pero también pueden causarse por bacterias o parásitos. De acuerdo con datos del Instituto Mexicano del Seguro Social, las infecciones respiratorias ocupan los primeros lugares de demanda de atención e incrementan alrededor del 40 % en temporada invernal . Las personas más vulnerables son los mayores de 65 años y los niños menores de cinco años.
Estas se transmiten por pequeñas gotitas de saliva que se expulsan al hablar, toser o estornudar y llegan directamente a otra persona o contaminan alguna superficie.
¿Cuáles son los síntomas de una infección respiratoria?
Cada enfermedad respiratoria es diferente y, por lo tanto, sus síntomas pueden variar. Una opción para clasificarlas es por las áreas que afectan:
Infecciones respiratorias altas
Son aquellas que afectan la nasofaringe, orofaringe, laringe, tráquea, oídos y senos paranasales. Es importante tomar en cuenta que cualquier enfermedad en esta zona puede extenderse al área inferior. Estas son:
Resfriado común (rinitis)
Se trata de la inflamación de la mucosa nasal, es una infección sumamente frecuente causada por diversos virus, como el rinovirus, adenovirus y el enterovirus. Son infecciones leves que se autolimitan, es decir, que no requiere un tratamiento específico para curarla, pero sí para controlar sus síntomas, que son: secreción de mucosa nasal, inflamación, estornudos, dolor de garganta, congestión, también puede aparecer fiebre baja, mialgias, cefaleas, tos seca, afonía, entre otros.
Gripa
Es causado por el virus de la influenza, sus principales síntomas aparecen de manera brusca y son: fiebre alta, escalofríos, dolor muscular, tos seca, cefalea y malestar general intenso. Puede ser una enfermedad desde leve a grave, por esa razón, es necesario saber cómo prevenir la gripa.
Faringitis
Es una inflamación aguda de la mucosa de la orofaringe, situada por detrás de la boca y amigdalitis. Sus principales síntomas son: sensación de fatiga, escalofríos, sequedad en la garganta, dolor faríngeo y puede aparecer fiebre leve. Otros son estornudos, tos, congestión nasal y presencia de aftas en boca y faringe.
Amigdalitis
Es la inflamación aguda localizada, principalmente, en las amígdalas palatinas, que se conoce vulgarmente como anginas. Este trastorno aparece de manera brusca con malestar general, fiebre, escalofríos y dolor de garganta al deglutir. Esta molestia puede llegar hasta el oído o afectar la nuca, dificultando el movimiento de la rotación del cuello y puede provocar cefaleas, náuseas e incluso vómito.
Otitis media aguda
Es la inflamación aguda del oído medio. Sus síntomas son: dolor de oído, disminución de la sensibilidad auditiva, fiebre, vómitos y diarrea.
Sinusitis aguda
Se trata de la inflamación de los senos paranasales. Sus síntomas varían de acuerdo con la edad, pero los más comunes son tos y escurrimiento nasal. Se puede acompañar de fiebre, cefaleas frontales, dolor al nivel de los senos paranasales, dolor al tragar y halitosis (mal aliento).
Infecciones respiratorias bajas
Estas afectan al área donde están los pulmones y los bronquios, las principales son:
Bronquitis aguda
Se trata de un trastorno inflamatorio traqueobronquial, que se asocia con una infección generalizada de las vías respiratorias. Inicia con tos seca y luego se vuelve productiva (aquella que arroja mucho moco); en algunos casos, hay fiebre. Es probable que la gravedad de la enfermedad aumente por exposición del humo de cigarro y contaminantes ambientales.
Bronquiolitis
Es una enfermedad viral del tracto respiratorio inferior, que aparece durante los primeros dos años de vida. Se manifiesta con tos, rinitis serosa y fiebre (normalmente leve). Los síntomas del tractor respiratorio inferior aparecen de dos a tres días después del contagio con irritabilidad, aumento de la frecuencia respiratoria, somnolencia, tos silbante y quejido respiratorio (obstrucción).
Neumonía aguda
Es una enfermedad inflamatoria del tejido pulmonar de origen infeccioso. Esta aparece de manera repentina con escalofríos, fiebre alta y tos seca inicial, que luego se hace productiva. Se puede acompañar por dolor puntual de lado y aleteo nasal, que es un signo de dificultad para respirar.
¿Cómo tratar las infecciones respiratorias?
Es necesario visitar el médico para saber con precisión cuál es el mejor tratamiento, ya que puede necesitar un antibiótico u otro fármaco totalmente diferente. Sin embargo, estos cuidados son auxiliares para cualquier tratamiento:
Reposar y permanecer en casa
Esto ayuda a que el cuerpo se enfoque en tratar la enfermedad y no gaste energía en otras actividades, además, disminuye el riesgo de que se propaguen infecciones respiratorias en la familia o en la comunidad.
Tener una buena alimentación
Seguir una dieta balanceada proporcionará los nutrientes necesarios para que las defensas actúen correctamente. Si hay deficiencia de alguno, el médico puede indicar el uso de algún suplemento alimenticio como el ácido ascórbico que ayuda a fortalecer el sistema inmune.
Este se vende en diferentes presentaciones, como el Ramico de 500 mg; el cual contiene 30 cápsulas a un precio aproximado de $76 en las farmacias de medicamentos genéricos. Antes de iniciar cualquier tratamiento, se debe consultar a un especialista de la salud.
Otras vitaminas esenciales para el invierno: piridoxina, vitamina D y vitamina A.
Beber líquidos
Tomar suficiente agua ayuda a que las secreciones del cuerpo puedan expulsar más fácilmente a los virus y bacterias, además, previene la deshidratación.
La mejor opción es tomar agua simple, pero también se puede obtener líquidos de un caldo de pollo o de las mismas frutas y verduras; no de refrescos ni bebidas azucaradas.
Evitar fumar
Este hábito incrementa el riesgo de complicaciones en las vías respiratorias, ya que afecta directamente a todo el sistema respiratorio, además de otros órganos importantes como el hígado, páncreas y estómago. Asimismo, se debe evitar exponerse a diferentes contaminantes en el aire, como el humo de los carros o fábricas.
No lo dejes pasar
Ya que conoces cuáles son los síntomas de una infección respiratoria, si los reconoces, acude con tu médico de confianza para el mejor tratamiento. Te invitamos a dejarnos tus comentarios y compartir este artículo con todos tus conocidos. Nos vemos.