Entérate de cómo funcionan los antiácidos para olvidarte de las molestias
Si has padecido reflujo, sabes lo importante que es tener cerca antiácidos. Seguro te ha pasado: estás descansando después de comer, mientras ves la televisión, cuando, de repente, sientes que parte del contenido de tu estómago regresa. Horrible, ¿no? ¡Qué suerte que cuentas con un antiácido!, pero…
¿Qué son los antiácidos?
Los antiácidos son sustancias con un pH base o alcalino que neutraliza los síntomas de la acidez estomacal (ácidos generados por las glándulas parietales). Dicho de otro modo, el antiácido alcaliniza la mucosa gástrica incrementando el pH.
Los antiácidos, por difícil que pueda resultar de creer, han sido utilizados por siglos para el tratamiento de pacientes con dispepsia y trastornos de acidez estomacal.
¿Por qué se necesita un antiácido?
Casi siempre, en el momento en que un alimento sólido o líquido entra al estómago, una banda de músculos que se encuentra al final del esófago lo cierra. Esta “banda” se llama esfínter esofágico inferior (EEI). En los casos en los que el esfínter no logra cerrase bien, los contenidos del estómago pueden devolverse (reflujo) hacia el esófago. Es entonces cuando este fenómeno ocasiona irritación en el esófago, provocando acidez y otros síntomas.
¿En qué casos puede necesitarse un antiácido?
Es normal que, en algún momento, todos hayamos experimentado acidez gástrica. Sin embargo, hay casos en los que, si se presenta a menudo, será necesario descartar padecimientos. Existen algunas causas ya bien reconocidas que pueden llegar a ocasionar acidez estomacal:
Hernia hiatal
Se trata de un padecimiento en el que cierta porción del estómago se extiende a través de una abertura en el diafragma, dentro del tórax. El diafragma, en pocas palabras, es el músculo que separa el tórax del abdomen.
Obesidad y sobrepeso
Aunque pudiera parecerte increíble, la presión que la grasa ocasiona sobre el estómago puede llegar a producir acidez estomacal y reflujo. Sobran razones para bajar de peso, ¿no lo crees?
Tabaquismo
Fumar puede causar acidez, ya que aumenta la producción de ácido y relaja el esfínter esofágico inferior. Esto crea una vía libre al contenido ácido del estómago. Además, causa inflamación en el esófago; así que, como habrás de imaginarte, te causará ardor.
Comer mucho y acostarse
Cuando nuestro estómago supera su capacidad, parte del contenido puede ser empujado hacia el esófago para reducir la presión.
Embarazo
Durante el embarazo se generan cambios hormonales y físicos. Por ejemplo, el incremento en la producción de progesterona, que disminuye las contracciones peristálticas del esófago y los intestinos, alentando la digestión. El crecimiento del bebé también es una de las causas que puede ocasionar el reflujo, pues, al crecer, empujará parte del estómago.
¿Son peligrosos los antiácidos?
Los antiácidos son muy seguros y sólo ocasionan efectos secundarios en en algunos casos como: dolor de cabeza, náuseas, estreñimiento y diarrea.
¿En qué casos no se deberían tomar antiácidos?
Si padeces enfermedades renales, no es recomendado el uso de un antiácido con carbonato de calcio o hidróxido de aluminio y carbonato de magnesio. Consulta con tu médico qué puedes tomar.
Algunas de las condiciones que debes tomar en consideración son:
- La postmenopausia, combinada con medicamentos como los inhibidores de la bomba de protones, reducen la absorción de calcio de los alimentos y pueden incrementar el riesgo de osteoporosis.
- En caso de haber padecido una infección de Clostridium difficile recientemente.
- Las personas mayores o que sufren de un sistema inmune débil.
¿Y qué antiácidos puedes tomar?
Sin duda, una de las opciones más recomendables es la combinación del hidróxido de aluminio y de magnesio.
Esta unión no sólo te ayudará a aliviar los síntomas de la acidez, también promueve la recuperación de úlceras pépticas. Y, a diferencia de otros antiácidos, el hidróxido de aluminio no produce gases de CO2 y tampoco provoca eructos.
La gran ventaja de este medicamento es que puedes encontrarlo en cualquier farmacia de genéricos. Así que no lo dudes, en caso de que sientas acidez estomacal, en el hidróxido de aluminio y de magnesio encontrarás un verdadero aliado.