¿Cómo saber si tienes várices?
Las várices son un problema que afecta principalmente a las mujeres. De hecho, se dice que el 70% de quienes son mayores a 60 años, las padecen. Hay que tomar en cuenta que una vez que las várices se manifiestan es imposible curarlas. Sólo se pueden controlar al combinar algunos tratamientos farmacológicos, compresión terapéutica a través de medias, alimentación y ejercicio.
Síntomas de las várices
Hay síntomas que son clave para saber si alguien ya tiene este problema. Por ejemplo, dolor en las piernas, principalmente en las tardes, ya que después de todo el día de permanecer de pie o sentado, la piel no circula correctamente. Otra manifestación física que suele agregarse es la hinchazón de los tobillos o de todas las piernas.
La comezón sin razón aparente es otro de los síntomas que acompañan a las várices. La pesadez durante el día y los calambres musculares por las noches, también son señales de este problema. Cuando los síntomas son leves, los expertos recomiendan mantener las piernas elevadas durante 15 minutos, al menos 3 veces al día. Esto ayudará a que la sangre fluya en las venas y no cause moretones, o que estas no se inflamen.
Otra recomendación es comer de forma más saludable. Hay alimentos que funcionan como una medicina natural para várices, como: piña, ciruela, nopal, jitomate y alga espirulina, entre otros. Algunas cosas que debes evitar son: azúcar refinado y grasas, ya que debilitan las venas y causan problemas circulatorios.
Si hablamos de fármacos usados como tratamiento para várices, el circulast, compuesto por diosmina con hesperidina 450/50 mg, es uno de los más recetados.
Otro factor que ayuda a tener un mejor tratamiento para várices es hacer ejercicio, pues ayudara a fortalecer tus músculos y mejorar considerablemente el paso de la sangre a través de las venas.