A diario vivimos un desgaste intenso en nuestras actividades, tanto en el trabajo, como con la familia y en la pareja ¡Nuestro corazón parece que está en una montaña rusa! Ante esta situación, es nuestro deber poner manos a la obra para cuidarlo. En este artículo te daremos consejos para que mantengas tu corazón sano sin importar la situación.

¿Por qué necesitamos un corazón sano?

Es necesario recordar que es el órgano central de nuestra circulación. Su función es bombear la sangre por todo nuestro cuerpo y a la vez, repartir todos los nutrientes. En otras palabras, él alimenta a todos los demás sistemas y órganos.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, la principal causa de muerte mundial son las enfermedades cardiovasculares. En México, hay casi 100 mil decesos por problemas cardiacos, según la Secretaría de Salud. Un panorama que nosotros podemos cambiar al modificar ciertos hábitos en nuestra alimentación y actividades.

A continuación, te presentamos cuatro acciones que puedes agregar a tu rutina diaria para tener un corazón saludable. Al inicio pueden ser tediosas, pero con el tiempo, te serán más sencillas.

Vigila tu alimentación

El primer punto es analizar nuestra dieta. Sabemos que comer un rico pastel de chocolate, tacos de carnitas o pizza con triple queso es un deleite. Lamentablemente estás combinaciones generan un exceso de grasas saturadas trans y azúcares, afectando a los lípidos sanguíneos.

Si tu dieta es rica en estos grupos, tu cuerpo almacena “colesterol malo” y disminuye el “colesterol bueno”. Esto da pie a que el primero invada la pared vascular que, a su vez, entorpezca el flujo sanguíneo.

Algunos alimentos que contribuyen a un corazón sano son:

Salmón: es rico en ácidos grasos omega-3, lo que reduce la inflamación y el riesgo de coágulos en la sangre. Equilibra los niveles del colesterol.

Aceite de oliva: Reduce los riesgos cardiovasculares porque baja los niveles del “colesterol malo”.

Almendras: debido a sus aceites naturales, vitamina E y otras sustancias, mantienen el control del colesterol.

Avena: contiene Beta Glutano, una fibra soluble que reduce el colesterol total y el “colesterol malo”.

Legumbres: su fibra soluble ayuda a mantener un corazón sano, ya que baja los niveles de “colesterol malo“. Disminuye la inflamación y la presión arterial.

Ajo: el sulfito de hidrógeno es clave en la dilatación y relajación en las arterias. Como consecuencia, desciende la presión sanguínea y las células transportan más oxígeno.

Haz ejercicio con regularidad

Hacer alguna actividad física fortalece nuestro corazón. Si te ejercitas, bombeas más sangre en cada latido, llevando más oxígeno a todo el cuerpo. También reduce los niveles del “colesterol malo” y elevar el “colesterol bueno” bajando el riesgo de un ataque al corazón.

Es recomendable hacer ejercicios aeróbicos, que generan una respiración más profunda, aumentando tu frecuencia cardiaca (reduciendo las calorías). Algunos ejemplos de este tipo son: caminar, trotar, correr, bailar, nadar y andar en bicicleta. Puedes realizar el que prefieras durante 30 minutos al día para mantener tu corazón saludable.

Sé que suena cansado, pero tranquil@ te puedes apoyar de un multivitamínico que incluya Rhodiola Rosea.  Este ingrediente aumenta la energía y resistencia física, además de que mejora la memoria y la concentración.

Otro punto a favor de esta planta es que es ideal contra problemas cardiacos. Sirve para mejorar el estado de ánimo y combatir el estrés, tema del siguiente punto.

Dale un respiro a tu vida

El estado anímico importa para nuestro corazón, sobre todo, cuando vivimos situaciones estresantes de forma constante. Entre más tiempos estemos expuestos, somos más propensos a un paro cardiaco, debido al incremento de los niveles de plaquetas. Las cuales tienen un papel importante en la coagulación y en situaciones anormales pueden bloquear una artería del corazón.

Algunas medidas para reducir el estrés y mantener el corazón sano son:

*Evita factores estresantes.

*Haz ejercicio físico o sal a caminar.

*Ten tiempos de descansos.

*Respira suavemente y de forma relajada.

8 formas de lograr un tratamiento para el estrés exitoso  

Conoce el estado de tu corazón

Es importante que evalúes constantemente su estado. Existen diversos estudios como el electrocardiograma, prueba de esfuerzo o la tomografía computarizada. Consulta a tu médico para que te recomiende el estudio idóneo que necesitas y cada cuándo debes realizarlo.

Es momento de que pongas en práctica esta lectura. Solo tienes uno, así que procura tener un corazón sano, porque es pieza fundamental en tu organismo.